0768- MISS ZOMBIE (2013)

    Una familia japonesa contrata a una zombie como empleada doméstica, sin que este hecho perturbe sus rutinas. Aunque resulta un tanto extraña, la mujer se ocupa del jardín y cumple con sus obligaciones sin la agresividad que caracteriza a los muertos vivientes.
    Nueva cinta japonesa que explora el punto de vista inverso, es decir, el de la perspectiva del zombie que padece en sus putrefactas carnes la maldad intrínseca de los humanos. Como sucediera antes en la película "Fido", Tanaka nos presenta una versión melodramática de la historia, al sustituir al ufano zombie por una ¿atractiva? zombie doméstica. Una pobre víctima de la sociedad que le rodea, padeciendo malos tratos, siendo ultrajada, apedreada e incluso forzada sexualmente...
    La pacífica y lánguida mujer no muerta, llega a la casa de un hombre acaudalado como objeto de un oscuro negocio de "trata de zombies". Durante su estancia se verá acompañada de una joven mujer y un niño vestido al estilo "Doraemon" aficionado a la fotografía. Encadenada a una jaula metálica de barrotes de acero, les dicen que se encuentra en la primera fase de zombificación, y es por ello que se portará de forma pacífica y obediente a las órdenes y deseos de la familia. ¿Pero... hasta que punto? De vez en cuando le asaltan imágenes de cuando estaba viva, y parece sentir más de lo que parecería a simple vista.


    Junto a su habitáculo se aporta un folleto de instrucciones, una pistola para dispararla por si se desmadra y una regla que debe cumplirse a rajatabla:"No darle nunca de comer carne". Solo fruta con gusanos. ¿Os suena?
    Nada que ver con la simpatía, la alegría y el sarcasmo de "Fido", aquella película de colores en tonos pastel ambientada en los años 50'. "Miss Zombie", (por cierto, un título que no le pega ni con cola), sería la antítesis de cualquier atisbo relacionado con la felicidad y optimismo. Relatando un melodrama zombie que parecerá eterno, pero por lo largo que se hace a pesar de sus 80 minutillos de rigor. Ya que su primera mitad no cuenta apenas nada, planteándose en mayor medida como un ejercicio onanista por parte del realizador, ofreciéndonos incluso distintas tomas de las mismas secuencias repetidas desde otros planos de cámara...
    Aunque dicho esto, si se logra resistir al hastío pertinaz, achacable también a la añadida carencia de ritmo, se asiste impávido a una recta final cargada de simbolismos en forma de cruentas venganzas... Ya me diréis también cual es la norma no escrita del subgénero que se carga de raíz la chica protagonista ensalzando al puro existencialismo....


     La cinta está filmada en riguroso blanco y negro, supongamos que para involucrarnos en el solemne tono melancólico-dramático-bucólico, viendo como una familia  se va resquebrajando a consecuencias de los malos actos de su entorno más próximo. En fin... Al principio no se explica nada de los antecedentes de la existencia de los zombies, para casi al final enterarnos un poco de soslayo.
    Así que partiendo de una idea bastante original, solo la recomendaría a los amantes del exótico e inigualable cine oriental. Abstenerse por tanto degustadores del cine gore y otros horrores mundanos salpicados de vísceras sin cuento. Pecará siempre la cinta de mirarse demasiado el ombligo, olvidando a su vez que el entretenimiento al menos debería asomar entre huecos y rendijas. No debo olvidarme de los flagrantes y consentidos fallos del argumento alargado hasta quebrarse. Por último me queda citar que padece en demasía de los excesos afines al cine nipón actual, olvidando que romper los esquemas por norma suele penalizar mas que otra cosa.



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