Mirando hacia atrás me quedo con otro dato: Los cientos de miles de visitas a lo largo de su existencia, dando fé de que casi siempre había alguien por ahí dispuesto a leer las más de mil entradas. Eso pese a que hubo tiempos mejores cuando se publicaban los enlaces de descargas. Y esos, como las gaviotas "Esas no volverán"que subrayó Rosalía de Castro.
Muchísimas gracias de corazón, especialmente a todos aquellos que os habéis tomado la molestia de comentar las entradas en alguna ocasión a lo largo de estos cinco años. Vosotros sois el motor que hace posible que perdure en el tiempo este humilde blog.
Aquí seguiré al pié del cañón mientras no falten las fuerzas. La interminable lista de películas por reseñar son un fiel recordatorio del largo camino aún por recorrer...
¿Qué andáis buscando en torno de las tumbas,
torvo el mirar, nublado el pensamiento?
¡No os ocupéis de lo que al polvo vuelve!...
Jamás el que descansa en el sepulcro
ha de tornar a amaros ni a ofenderos
¡Jamás! ¿Es verdad que todo
para siempre acabó ya?
No, no puede acabar lo que es eterno,
ni puede tener fin la inmensidad
* Por cierto, hoy he dejado el tabaco, llega el acontecimiento tras la promesa realizada a mi hija de no volver a recaer en el vicio que me ha acompañado desde los 14 años. Razón de más para que este sea un gran día, y ya no solo por la conmemoración del lustro de existencia del blog...
Aquí dejo la foto del que espero sea mi último cigarrillo.
Abrazos a todas y todos... Se os quiere